أَلَمۡ تَرَ إِلَى ٱلَّذِينَ نُهُواْ عَنِ ٱلنَّجۡوَىٰ ثُمَّ يَعُودُونَ لِمَا نُهُواْ عَنۡهُ وَيَتَنَٰجَوۡنَ بِٱلۡإِثۡمِ وَٱلۡعُدۡوَٰنِ وَمَعۡصِيَتِ ٱلرَّسُولِۖ وَإِذَا جَآءُوكَ حَيَّوۡكَ بِمَا لَمۡ يُحَيِّكَ بِهِ ٱللَّهُ وَيَقُولُونَ فِيٓ أَنفُسِهِمۡ لَوۡلَا يُعَذِّبُنَا ٱللَّهُ بِمَا نَقُولُۚ حَسۡبُهُمۡ جَهَنَّمُ يَصۡلَوۡنَهَاۖ فَبِئۡسَ ٱلۡمَصِيرُ
¿Acaso no ves a aquellos a los que se les habían prohibido los conciliábulos, pero igualmente persisten en hacerlo en secreto? Se confabulan para la maldad, la enemistad y la desobediencia al Mensajero. Cuando se presentan ante ti [¡oh, Mujámmad!] no te saludan como Dios ha ordenado que lo hagan, y se dicen ente ellos [en tono burlón]: "¿Por qué será que Dios no nos castiga por lo que decimos?" Será suficiente el Infierno al que serán arrojados. ¡Qué pésimo destino!
يَـٰٓأَيُّهَا ٱلَّذِينَ ءَامَنُوٓاْ إِذَا تَنَٰجَيۡتُمۡ فَلَا تَتَنَٰجَوۡاْ بِٱلۡإِثۡمِ وَٱلۡعُدۡوَٰنِ وَمَعۡصِيَتِ ٱلرَّسُولِ وَتَنَٰجَوۡاْ بِٱلۡبِرِّ وَٱلتَّقۡوَىٰۖ وَٱتَّقُواْ ٱللَّهَ ٱلَّذِيٓ إِلَيۡهِ تُحۡشَرُونَ
¡Oh, creyentes! Cuando hablen en secreto no lo hagan para cometer una maldad, crear una enemistad o desobedecer al Mensajero, sino que hablen en secreto para acordar actos de benevolencia y piedad. Tengan temor de Dios, que ante Él comparecerán.
إِنَّمَا ٱلنَّجۡوَىٰ مِنَ ٱلشَّيۡطَٰنِ لِيَحۡزُنَ ٱلَّذِينَ ءَامَنُواْ وَلَيۡسَ بِضَآرِّهِمۡ شَيۡـًٔا إِلَّا بِإِذۡنِ ٱللَّهِۚ وَعَلَى ٱللَّهِ فَلۡيَتَوَكَّلِ ٱلۡمُؤۡمِنُونَ
Las confabulaciones son obras del demonio para entristecer a los creyentes. Pero, en realidad, no podrán hacerles ningún daño, salvo que Dios lo permita. Que a Dios se encomienden los creyentes.