فَلَمَّا قَضَيۡنَا عَلَيۡهِ ٱلۡمَوۡتَ مَا دَلَّهُمۡ عَلَىٰ مَوۡتِهِۦٓ إِلَّا دَآبَّةُ ٱلۡأَرۡضِ تَأۡكُلُ مِنسَأَتَهُۥۖ فَلَمَّا خَرَّ تَبَيَّنَتِ ٱلۡجِنُّ أَن لَّوۡ كَانُواْ يَعۡلَمُونَ ٱلۡغَيۡبَ مَا لَبِثُواْ فِي ٱلۡعَذَابِ ٱلۡمُهِينِ
Cuando decreté para él que muriera, no les advirtió de su muerte sino un insecto de la tierra que carcomió su bastón, y cuando [Salomón] se cayó, se hizo evidente [para la gente] que si los yinnes hubieran tenido conocimiento de lo oculto, no habrían permanecido en el castigo humillante [de seguir trabajando].
لَقَدۡ كَانَ لِسَبَإٖ فِي مَسۡكَنِهِمۡ ءَايَةٞۖ جَنَّتَانِ عَن يَمِينٖ وَشِمَالٖۖ كُلُواْ مِن رِّزۡقِ رَبِّكُمۡ وَٱشۡكُرُواْ لَهُۥۚ بَلۡدَةٞ طَيِّبَةٞ وَرَبٌّ غَفُورٞ
Las moradas de Saba eran un signo [de las gracias de Dios]: poseían dos huertos, uno [en un valle] a la izquierda y otro a la derecha. [Les dije:] "Coman del sustento de su Señor y agradézcanle. Tienen una buena tierra, y [si son agradecidos, sepan que] su Señor es Perdonador".
فَأَعۡرَضُواْ فَأَرۡسَلۡنَا عَلَيۡهِمۡ سَيۡلَ ٱلۡعَرِمِ وَبَدَّلۡنَٰهُم بِجَنَّتَيۡهِمۡ جَنَّتَيۡنِ ذَوَاتَيۡ أُكُلٍ خَمۡطٖ وَأَثۡلٖ وَشَيۡءٖ مِّن سِدۡرٖ قَلِيلٖ
Pero se apartaron, entonces envié sobre ellos la inundación [que produjo la ruptura] de las represas [que habían construido], y les cambié sus dos huertos por granjas con frutos amargos, tamarindos y algunos árboles de azufaifo.