6. Y si algún idólatra te pide protección (¡oh, Muhammad!) para escuchar la palabra de Al-lah, concédesela para que la escuche y después facilítale la llegada a un lugar seguro. Esto es porque son gentes que no conocen (la palabra de Al-lah).
6. Y si algún idólatra te pide protección (¡oh, Muhammad!) para escuchar la palabra de Al-lah, concédesela para que la escuche y después facilítale la llegada a un lugar seguro. Esto es porque son gentes que no conocen (la palabra de Al-lah).