10. Y si le concedemos Nuestra gracia después de haberle alcanzado la adversidad, dirá: “El mal se ha alejado de mí”, y se muestra contento y altivo (y desagradecido con su Señor).
10. Y si le concedemos Nuestra gracia después de haberle alcanzado la adversidad, dirá: “El mal se ha alejado de mí”, y se muestra contento y altivo (y desagradecido con su Señor).