25. Y ambos corrieron hacia la puerta y ella le desgarró la camisa por detrás, y se encontraron con su marido en el umbral. Ella dijo (maliciosamente para alejar de ella cualquier sospecha): “¿Qué merece quien ha pretendido una mala acción contra tu mujer sino la cárcel o un castigo doloroso?”.


الصفحة التالية
Icon