25. Y a todos los mensajeros que enviamos con anterioridad a ti les revelamos: “Ciertamente, no hay más divinidad que Yo; adórenme, pues, solo a Mí”.
25. Y a todos los mensajeros que enviamos con anterioridad a ti les revelamos: “Ciertamente, no hay más divinidad que Yo; adórenme, pues, solo a Mí”.