31. Y no hemos asignado como guardianes del Infierno sino a ángeles. Y hemos hecho de su (escaso) número una prueba para quienes rechazan la verdad (con el fin de que aumente su extravío); y para que quienes recibieron las Escrituras (los judíos y los cristianos) tengan certeza de que es la verdad (al coincidir el número de los ángeles con lo que mencionaban sus libros sagrados); y para que aumente la fe de los creyentes y no duden, ni duden tampoco los judíos y los cristianos. Y para que los enfermos de hipocresía y duda y quienes niegan la verdad digan: “¿Qué pretende Al-lah con ello?”. Así extravía Al-lah a quien quiere (por haber rechazado la verdad) y guía a quien quiere. Y solo tu Señor conoce todo lo referente a Sus ejércitos (los ángeles). Y (el fuego del Infierno) no es sino una advertencia para los hombres.